Blog finanzas, actualidad y política. Consejos y opinion de varios temas.
30 Junio 2021
Para poder realizar una inversión es necesario destinar dinero a un negocio, a un bien o a un proyecto. Pero también es importante entender que hay un riesgo de pérdida, ya que no se trata de algo seguro y que existe la posibilidad de siquiera recibir de vuelta el mismo monto que se invirtió en un inicio.
Es imprescindible saber que hay que invertir con un capital proveniente de dinero que se tenga la disposición de perder y que no sea requerido para gastos imprescindibles. Es posible calcular el riesgo (con imprecisión), pero resulta factible contratar un crédito instantáneo para invertir cuando se tiene un conocimiento de la inversión, sin que sea perjudicial a nivel financiero.
Para poder tener una estabilidad mínima financiera para invertir, hay que tener unos ahorros que se destinen a este fin. Esos ahorros deben ser diferentes a aquellos que sean para gastos planificados o para emergencias porque es dinero con un riesgo de pérdida. Por más rentable que parezca una inversión, siempre hay que respetar los límites autoimpuestos, para no perder el control de las finanzas.
Una recomendación es tener esos fondos en una cuenta bancaria destinada únicamente a este fin, y así hacer una separación más clara.
Es imprescindible comprender cómo funciona el bien que vamos a rentabilizar. Sea un inmueble, una criptomoneda o la bolsa, por solo poner algunos ejemplos, no hay que tener falsas expectativas en cuanto al retorno de la inversión. Es imperante conocer a profundidad el producto, con el fin de tomar decisiones informadas, y no caer ante el impulso de conseguir mini creditos para destinar dinero a la primera oportunidad que suene tentadora.
Es común hoy en día que nos lleguen ofertas de conocidos pidiendo que invirtamos en un negocio con alta rentabilidad, pero que no son capaces de explicar a detalle cómo funciona. Por lo general, suelen ser sistemas piramidales y no verdaderas inversiones. Es importante tener la máxima cantidad de información posible antes de invertir nuestro dinero en cualquier cosa, para calcular riesgos, tiempos y rentabilidad. El factor del azar no es determinante aquí.
Acorde a nuestra capacidad económica, edad, intereses y tolerancia al riesgo, es posible tener un perfil de inversionista. Es importante elegir algún tipo de inversión que se acomode a los parámetros de ese perfil, ya que así será mucho más fácil hacerle un seguimiento y tener más información.
Este aspecto, aunque parezca secundario, es el más importante. La personalidad personal no tiene que ver aquí, sino los rasgos que predominen al momento de invertir. Es diferente una persona que se decante por los inmuebles para su arriendo o futura venta, a una que prefiera rentabilizar la compra de bonos y acciones de pequeñas empresas, por ejemplo.